Punto suspensivo.

Fuiste lo más bonito y desastroso que me pasó.
Aprendí tanto del dolor, como también del amor.
Me doliste demasiado, también te quise demasiado, más de lo que me gusta admitir.
Te deje en mayo y te llore hasta febrero.
Mi vida siguió, cambié, crecí, aprendí, pero nunca te olvide.
Una parte mía se quedó atorada entre tus brazos y no quiso volver.
Una parte tuya quedó marcada en mi alma y no pude borrarla.

Cada tanto te colabas en mi presente. 
Un recuerdo tuyo aparecía en mi mente.

Hoy llego un mensaje, ese que tanto espere.
Hoy volves a mi presente y ya no solo en recuerdos.
Hoy veo tu vida a través de una pantalla.
Hoy ignoro tu mensaje y sigo.
Capaz nunca te conteste.
Hoy veo tu mensaje y solo escribo.
Hoy creo que hay capítulos que deberán quedar en un eterno puntos suspensivos...





Comentarios

Entradas populares de este blog

Andate.

Parate a ser felíz.