Desconocido de junio

Si lees esto volvé.

Escribo mierdas sin lógicas y de repente te pienso, la piel se me eriza.

El texto se convierte en mi plegaria, rezo para que por un milagro te acuerdes de mí.

Escribo lo que nunca vas a leer, quisiera que presintieras que te extraño.

Volvé y mostrame cuanta mierda más puedo soportar.

Ojalá la telepatía fuera suficiente cuando el orgullo me impide volver a buscarte.

El dolor es adictivo, pero entre tus brazos la manipulación era insignificante,

tus mentiras solo el efecto colateral de un sexo sin igual.

El cuerpo recuerda mejor que la mente.

Volvé y confirmame que no existen vidas donde estemos separados.

La única promesa que pude cumplir fue nunca volver a buscarte.

Orgasmos ruidosos.

El amor propio desparramado en el piso.

Orgasmos compartidos.

Sincrónicos.

Cuerpo y vulnerabilidad desnuda.

Volvé y recordame cuanto amor propio me falta.

Aún te deseo y te odio casi por igual.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi tentación.

Si no hay amor que haya sexo.

Vainilla y coco.