Entradas

Mostrando entradas de julio, 2024

Julio 25

Escribir para escupir  porque me enseñaron a no tragarme el chicle y aprendí a dejarlo, solo cuando tiene gusto a nada. Ya no me conformo con sabor a poco. ¿Cómo se expresa lo que se siente sin hacerlo personal? No sé escribir sin que todo sea parte de mí. Soy egoísta. Sí. Soy egoísta. ¿Siempre estaremos fingiendo ser buenos? Soy mala persona, o eso pienso cuando piso la cola de mi gato. No quiero discursos poéticos, pero pienso en versos y le planteo cuestionamientos al espejo. Sigo escribiendo mientras escupo el chicle. Globo tutti frutti. Vivo en un vaivén de moral y "debería ser"  todas las contradicciones bailan dentro de mí y leo sobre filosofía para musicalizar el baile. Aprendí a lidiar con los que nunca entenderán mi  manera de pensar. Y mucho menos, mi manera de escribir. Pierdo la suavidad muy seguido. Por momentos, me vuelvo hostil. Ya no quiero masticar chicles con sabor a nada. Globos de tutti frutti. Vida color rosa.  Ya no compro con la menta ni el mentol. Est

Julio 20

El plan es que no hay plan. No tengo respuestas para tu ansiedad. Mi vida está en slow motion. Ya no me visitan las dudas. Y tampoco lo hacen las certezas. Estoy ahí, justo en medio de tu perfecto plan y tu camino más incierto. ¿Destino? Mi vida es una incógnita, un acertijo indescifrable, un cuestionamiento filosófico. Básicamente, la existencia misma. Aunque yo... No sea la misma. Ni mucho menos, básica. Sobrevivo por sentido común, aunque este sea, el menos común de los sentidos. Vivo como si tuviera todas las respuestas, aunque tal vez solo muera con todas las preguntas. Estoy en calma y el silencio dejó de ser ensordecedor. Ya no intento entender los paisajes. La poesía no se explica. No miro el cielo buscando descifrar misterios. Ya no le reclamo claridad al insomnio. No le exijo buen humor a la siesta. No le pido a la vida que me revele su magia. Me fui de viaje. Y la lógica se tomó vacaciones.

Julio 11

  Puedo ver tu mano acercarse a la mía. Uniendo fragilidad y fortaleza. Me refugié en el placer de la soledad. Me engrandecí, orgullosa de todo lo que logre sin ayuda. Recibí felicitaciones. Jugué demasiado al solitario. Siempre one player. La soledad no necesita aplausos. Singular, impar, única, irrepetible, pequeña isla. ¿Amor propio o falsa seguridad? En serio, nadie ve mi fragilidad. Deseo agarrar tu mano... Las murallas se desdibujan, bajo las barreras, me dejo atravesar. Estoy aprendiendo a construir puentes, sin quemarlos justo cuando el miedo arde. Compartir es otro arte. Jugar al truco. Multiplayer. El amor se expande en conjunto. Agarre varias manos. Abrace varios mambos. Y al final... la isla, dejo de estar desierta.